viernes, 13 de agosto de 2010

HISTORIA DE UNA NUEVA VIDA #4!!!

PRIMERA SEMANA EN EL CUERPO DE ARIEL!

TENTACIONES EN MI NUEVO CUERPO!

El primer día fue especialmente extraño, estaba entrando en la casa a la que había entrado tantas veces para encontrarme con mi novia Paola, pero esta vez no entraba para verla a ella, estaba entrando a mi nueva casa, aun que no tan nueva para este cuerpo el cual estaba tan familiarizado con esta esa paredes y que aun que yo las conocía para mí era como si fueran totalmente nuevas. Al pasar la puerta mire en todas direcciones observando atentamente la que sería mi casa durante los próximos 365 días, en ese instante escuche la voz de un hombre, una voz fuerte y penetrante, una voz que había escuchado tantas veces a la hora del café cuando visitaba a Paola, pero esta vez esa voz genero en mi cuerpo una sensación de tranquilidad, de apego, de cariño, y aun que la escuche asía apenas una de hora, y sonaba igual que siempre, era como si esta vez fuera una voz cariñosa y protectora, no lo podía creer era la voz de quien en algún momento fue mi suegro y ahora era mi padre. En ese instante el me pregunto que si algo me ocurría, que me veía confundida, a lo que yo respondí que no sucedía nada, solo era que estaba contenta de estar de vuelta en casa y que nada malo me hubiese sucedido. Cuando volteé a ver, a su lado estaba Paola quise saltar y abrasarla y darle uno de esos besos que tanto me gustaba darle cuando era su novio, pero recordé que las cosas habían cambiado ya no podía darle besos, acariciar su cuerpo, hacerle el amor, ni siquiera decirle que la amaba a como acostumbraba decírselo todos los días, ahora ella era mi hermana mayor y yo su hermana pequeña.
Inmediatamente dije –estoy cansada, voy a irme a mi cuarto a dormir- eso lo dije con tal de cambiar el ambiente del momento, no quería estar cerca de Paola, por lo menos no por el momento además ya en mi cuarto podría pensar mejor acerca de mi nueva vida si es que no me vencía el sueño. A esto Paola me recomendó que por qué no me bañaba antes de dormir, dije que si con la cabeza y me dirigí a mi cuarto, el problema fue que por instinto entre al cuarto de Paola, a lo que ella me dijo a lo lejos, que si ocupaba algo que ella me lo prestaba que por esta ocasión no me pondría ningún pero, a lo que le respondí que muchas gracias, pero que no ocupaba nada.
El instante en que estuve en la puerta del cuarto de Paola fue muy pequeño, pero para mí fue eterno ver la cama donde tantas veces le hice el amor a la más hermosa mujer de este mundo, donde tantas veces le prometí que nunca más estaría con ninguna otra mujer y que solo la amaría a ella. Y ahora no solo no podía decirle todas esas cosas, sino que también había tenido relaciones con su propia hermana, que le había sido infiel y que de ahora en adelante no podría compartir mi cama con ella, sino que lo haría con otros hombres.
Cuando ingrese a mi cuarto o más bien dicho al Cuarto de Ariel, de nuevo tuve la sensación de que era totalmente nuevo, ahora dormiría en un cuarto con paredes de color rosa, con posters de Chayanne y Alex Hubago , con peluches en la que sería mi cama, con una sabana de flores y con ositos, un pequeño tocador con un espejo en el que colgaba la foto del que ahora era mi novio, lo que me preocupo por qué recordé lo que Ariel me había pedido, además de recordar lo que siempre había pensado sobre él, e incluso me dio asco el simple hecho de pensar en que el me tocara y más aun el besarlo. Junto a esa foto había una foto de Ariel junto con Paola, en un paseo que hicieron a la playa hace un mes más o menos, y al ver a ambas con eso trajes de baño que las hacía ver tan sexys olvide por un instante lo que me estaba ocurriendo, primero contemple a Paola, cosa que me empezó a excitar levemente, y cuando vi a Ariel solo pude pensar que era una flaca sabrosa y bien putita ya que su traje de baño era muy pequeño y dejaba muy poco a la imaginación, en ese instante me excite mucho y mas al recordar que ya ese cuerpo había sido mío, esa excitación me provoco mucha humedad en mi entre pierna y mi vagina, lo que me hizo darme cuenta que me estaba excitando al verme a mí mismo, lo que me hizo sentir como una tonta.
Quise enfriar mis pensamientos por lo que abrí el armario de la ropa para buscar que ponerme luego de bañarme. En el instante en que abrí la puerta, vi varias de las ropas que tantas veces vi puestas en mi nuevo cuerpo y recordé lo sexy y atrevida que se veía mi cuñada con ella, lo que nueva mente me empezó a excitar. Inmediatamente cerré los ojos y tome una bata de dormir que encontré y una tanguita de color negra que estaba de primera, salí del cuarto y busque un paño y de inmediato entre al baño, cerré la puerta y me senté, no podía creer todas las ideas que me estaban pasando por la cabeza, desde masturbarme, meter cosas en mi vagina, tener sexo con otras mujeres e incluso con mi nuevo novio, quería experimentar y no podía dejar de pensar en esas cosas, de pronto tuve la necesidad de orinar y aun que ya había experimentado un poco las sensaciones de este cuerpo durante nuestro cautiverio, no había podido contemplar la belleza de este cuerpo ni mucho menos mis nuevas partes intimas, y con solo pensar en eso tuve una sensación de vergüenza, esa sensación no venía de mis pensamientos, era el cuerpo de Ariel el que me hacía sentir así, estaba por ser visto por alguien que no era su verdadero cuerpo o por lo menos esa fue la única explicación que encontré a ese sentimiento. No quedaba de otra ahora yo era Ariel y era importante que me familiarizara con mi nuevo cuerpo, por lo que baje mi falda de mezclilla, luego la tanguita de color rosa que tenia puesta, e hice lo que mi cuerpo me pedía que hiciera, y sentí el alivio que sentía siendo hombre, pero curiosamente era distinto, tome un trozo de papel y me dispuse a secarme en ese instante me di cuenta por primera vez que tenia la vagina depilada por completo y al pasar mi mano sentí una sensación como electricidad corriendo por mi cuerpo, había tocado una parte muy sensible de mi vagina y tuve la necesidad de seguir tocándola, me quite la blusa y el sostén, el cual me costó bastante quitarlo, lo que me dio tiempo de recapacitar en lo que estaba haciendo, así que me metí al baño pensando que eso me ayudaría a distraerme………………………………

CONTINUARA…

1 comentario:

  1. Hola, espero que no tardes mucho para publicar la continuacion, de esta fabulosa historia.

    Besos

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